Durante la reunión celebrada en Montevideo los pasados 25 y 26 de abril se trató la problemática de las agresiones al personal sanitario, impulsando la política de "tolerancia 0" para este tipo de actos que si bien afectan en primer lugar a los propios profesionales de la salud implican en última instancia una agresión a los propios pacientes que ante estas situaciones se ven privados de la atención profesional.

Otro tema analizado por los representantes de las organizaciones médicas de los 13 países presentes fue el de la previsión social del médico cuyo objetivo "debe ser defender al médico durante el desarrollo profesional y también al final de su actividad profesional", involucrando a todas las generaciones de profesionales.